2 de septiembre de 1878
Por Miguel Abramzón
Un 2 de septiembre de 1878 se produjo en Argentina la
primera huelga obrera. Hubo otros acontecimientos de similar tenor de los que
no se tiene suficiente información como para aseverarlos, no obstante los
mencionamos, son: en 1855 los coristas del Teatro Argentino realizaron una
huelga exigiendo una función anual en beneficio exclusivo de ellos. Años más
adelante, 1871, los lancheros de la
Boca realizaron medidas de fuerza en reclamo por mejores
salarios (Álvaro Yunque los menciona en su obra sobre Alem).
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| Cuadro "Manifestación" de Antonio Berni |
A fines de 1870 los Tipógrafos se ponen en contacto
epistolar con la sección española de la
AIT , y es el propio Engels quien sugiere aprovechar a los
tipógrafos bonaerenses como iniciadores del desembarco de la AIT en América del Sur. Estas
influencias no se harían esperar y en un discurso de 1871 se escucharon frases
que denunciaban la “explotación del hombre por el hombre”, y afirmaciones como:
“la emancipación de los trabajadores ha de ser obra de los trabajadores
mismos”.
Se cumplen 134 años de la primera huelga en Argentina.
Corría el año 1877 y los empresarios periodísticos de entonces no respetaron el
reclamo de sus empleados que pedían una actualización salarial. La desatención
de dicha demanda generó un estado de ánimo en los tipógrafos que provocó varias
asambleas, en las que se modificó el estatuto mutualista de la vieja Sociedad
Tipográfica Bonaerense, constituida tempranamente en 1857, por un estatuto con
carácter más clasista y adecuado para la defensa de los trabajadores
tipográficos. De esta manera, del mutualismo al gremialismo, el 30 de agosto de
1878 se conformó la
Unión Tipográfica , cuyo primer secretario fue de nacionalidad
francesa; un tal Gauthier.
Podríamos calificar a la Unión Tipográfica
como la primera asociación gremial de este país. Y su estreno de fuego fue el 2
de septiembre de ese 1878 en el que pusieron en marcha una prolongada huelga
que se extendió a lo largo de todo el mes de septiembre.
Aquellos empresarios criollos del siglo XIX no tenían la
experiencia de los actuales. Intentaron aplacar la lucha obrera recurriendo a
rompehuelgas. Fueron en busca de los tipógrafos de Montevideo, quienes
respondieron con auténtica solidaridad de clase y negaron todo tipo de
colaboración que fuese en contra de sus colegas de Buenos Aires. Y como si no
hubiese sido suficiente, los tipógrafos montevideanos hicieron público un
manifiesto: “…saludamos y aplaudimos la trascendental huelga bonaerense”.
PUNTO DE PARTIDA
Luego de dos semanas de iniciada las medidas de fuerza
(16/8/1878), ante semejante atropello, el diario El Nacional se despachó con la
exégesis según la cual, “El Socialismo usa huelgas como instrumento de penetración,
pero el Socialismo es una necedad en América”. Y aventuró el siguiente
pronóstico: “La huelga es un recurso vicioso, y no siempre para los que la
ponen en práctica da buenos resultados”.
Con la primera huelga en Argentina los tipógrafos lograron
el aumento salarial buscado, y el establecimiento de la jornada de trabajo de
menos de 10 horas. Más importante aun, consiguieron el remplazo de los menores
por adultos y el compromiso de la prohibición de emplear a menores de edad en
el futuro.
Así, a este acuerdo conformado entre una asociación gremial
y la patronal podemos considerarlo como el primer convenio colectivo de trabajo
de Argentina.
Fuente: AL DORSO
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